El Hospital Clínico Universitario de València ha reformado el servicio de Esterilización y ha renovado los sistemas de climatización. Se trata de una actuación que ha contado con un presupuesto de 316.536 euros y que ha permitido dotar la sala con la máxima cualificación en cuanto a seguridad. En esta Unidad es donde se esteriliza y se almacena el material quirúrgico que se utiliza en el centro.

En cuanto a las exigencias de climatización y ventilación de las distintas áreas del servicio de Esterilización (zona estéril, zona limpia y zona sucia) las instalaciones se han adaptado a la normativa más restrictiva de validación y cualificación de salas de ambiente controlado en hospitales, teniendo en cuenta las normas UNE de referencia.

Para ello se ha realizado una actualización de los sistemas de climatización a los que, para conseguir una gestión más eficiente, se ha incorporado un sistema de control que monitoriza y regula todos los parámetros de funcionamiento claves para garantizar las condiciones de bioseguridad exigidas.

De manera añadida, se ha modificado la distribución de los espacios para poder garantizar los recorridos a través de los circuitos de material sucio y material limpio. Además, se han renovado, entre otros elementos, la carpintería y los difusores con filtración absoluta frente al paso de partículas y luminarias LED estancas para garantizar las máximas condiciones de asepsia exigidas en las salas de ambiente controlado.

En este sentido, la jefa del servicio de Ingeniería y Mantenimiento del Hospital Clínico de València, María José Picazo, ha hecho hincapié en que todas estas actuaciones han permitido “garantizar el cumplimiento de la normativa más restrictiva de validación, logística e interoperabilidad de los sistemas para conseguir el objetivo final, que es garantizar las máximas condiciones de asepsia y de bioseguridad exigidas en una sala de ambiente controlado, como es la unidad de Esterilización donde se desinfecta todo el material quirúrgico del hospital”.

Mayor eficiencia energética

La actuación, además, se ha pensado para incorporar mejoras que supongan una mayor eficiencia energética con el consiguiente ahorro en dióxido de carbono. Así pues, en cuando a la climatización e iluminación, se han incorporado equipos que suponen un ahorro de 7.082 kilogramos de dióxido de carbono al año con respecto a equipos anteriores.

La nueva iluminación supone un ahorro de más del 50 % en energía por la sustitución de iluminación fluorescente a LED, sumado a un 5 % de ahorro en energía en el sistema de climatización, al disponer de ventiladores con motores electrónicos de alta eficiencia energética.