Especialistas del Clínico aconsejan cuidar el sueño puesto que ayuda a la consolidación de la memoria, la creatividad y la regulación emocional
València (17.03.23). Con motivo la decimosexta edición del Día Mundial del Son que se celebra mañana viernes 17 de marzo, promovido por la Sociedad Mundial del Sueño (*World *Sleep *Society), el Servicio de Neurofisiología/Neurofisiología del Hospital Clínico Universitario de València se ha querido sumar a esta celebración que este año tiene como lema "Dormir es esencial para la salud".
Tal como ha explicado Manuel de *Entrambasaguas, especialista del Servicio de Neurofisiología/Neurofisiología del Hospital Clínico "El lema de este año es fundamental para concienciar sobre el esencial que es el sueño para nuestra salud. El sueño contribuye a la restauración de las funciones biológicas. Aunque se desconocen con exactitud todas las funciones del sueño, algunas de ellas se han descubierto en los últimos años, como por ejemplo que durante el sueño lento N3 ocurre una limpieza del seso por parte del líquido cefalorraquídeo, a través de un lavado en profundidad, que ayuda a eliminar productos de desecho del metabolismo cerebral como algunos tipos de proteína que su *acúmul se relaciona con algunas formas de demencia".
"Dormir bien también podría ayudar a superar las vivencias desagradables. Se sabe que durante el sueño REM se silencia la actividad de una parte del seso denominada "*locus *coeruleus" relacionada con la *noradrenalina, un *neurotrasmisor responsable de cambios fisiológicos de adaptación como alerta, palpitaciones, boca seca, sudor de manos o tensión muscular que aparecen ante un sobresalto o se prolongan en situaciones de estrés y ansiedad. Así, las personas que duermen bien tendrían mayor facilidad para desconectar esas sensaciones del recuerdo del sucedido y procesar así situaciones emocionales difíciles, mientras que quienes sufren insomnio y no consiguen estabilizar el sueño REM pueden tener problemas para realizar esta función. Dormir también ayuda a la consolidación de la memoria, la solución de problemas y la creatividad, de aquí viene la frase de ‘lo consultaré con la almohada' ha explicado.
Tal como asegura el especialista, es importante con referencia al sueño que la población conozca que el principal sincronizador del sueño es la luz. "Para reforzar los ritmos circadianos y poder disfrutar de un sueño de calidad por la noche es conveniente exponerse en la luz solar durante el día, y mejor encara si se acompaña de actividad física. Por eso, también se tienen que evitar las luces blancas azuladas por la noche, como la que emiten las pantallas de los dispositivos electrónicos, puesto que le enviaríamos a nuestro seso la señal equivocada que todavía es de día. Hay que buscar una iluminación cálida y suave cuando se acerque la hora de acostarnos" ha añadido
"Quién duerma muy poco, lo haga demasiado, en situaciones inapropiadas o haga cosas extrañas durante el sueño tendría que consultarlo con su médico/médico porque le remita al especialista, por si pudiera presentar algún trastorno del sueño" tal como explican los especialistas del Servicio, Paula *Cases y Manuel de *Entrambasaguas.
"Dormir bien, con un sueño suficiente y de calidad, no es una opción o un capricho, sino una función esencial para nuestra salud y bienestar". Tal como aconsejan desde la Unidad se tiene que dedicar entre 7 y 9 horas al sueño para un adulto (una hora menos para las personas mayores) y nunca menos de seis horas.
Consejos de los especialistas de cara al cambio temprano
El próximo día 26 de marzo se producirá el cambio al horario de verano. Este cambio puede provocar en algunas personas una desadaptación y síntomas como fatiga y cansancio general, somnolencia por el día y dificultad para coger el sueño por la noche, irritabilidad o falta de concentración. Tal como ha explicado el doctor *Entrambasaguas "Esto puede ocurrir si no nos reajustamos pronto al nuevo horario".
Algunas de las cosas que podemos hacer para intentar corregir estos síntomas son: "Hacer una transición desde el final del día hasta el momento de irnos a dormir, poniendo un límite al tiempo de trabajo, tareas e incluso de ocio, porque el seso se relaje y pueda aparecer el sueño. Es recomendable acostarse solo cuando tengamos sueño, y sobre todo, mantener una hora regular de levantarnos, y exponernos a la luz del día para activarnos. Si mantenemos estos hábitos, en pocos días estaremos adaptados al nuevo horario."